Provistos de pancartas y banderolas, cientos de pobladores y autoridades cusqueñas salieron a las calles de la ciudad incaica para exigir la demolición del hotel Sheraton que se construye en el centro histórico de la ciudad de Cusco.
Los manifestantes se congregaron en la plaza de armas y recorrieron varias calles. Durante la jornada que tiene como consigna “Sheraton no va”, se unió y encabezó la marcha el alcalde Carlos Moscoso Perea.
Recordemos que la Unesco recomendó la demolición del hotel porque podría ocasionar que la ciudad imperial pierda la categoría de patrimonio cultural de la humanidad.
Las autoridades de Cusco afirmaron que irán a instancias a nivel nacional e internacional hasta lograr la demolición de la gigantesca construcción que consta de siete pisos y tres sótanos, la cual va en contra del plan maestro del centro histórico.