La violencia contra los trabajadores del transporte público en Lima llegó a un punto crítico. Así lo advirtió Julio Rau Rau, representante de la Confederación Nacional de Empresas de Transporte (CONET Perú), quien responsabilizó al Estado por la ola de extorsiones, atentados y asesinatos que sufren a diario conductores y cobradores en distintos puntos del país.
“No tenemos autoridades, no hay seguridad y estamos siendo amenazados todos los días. A nosotros no nos interesan las marchas políticas ni los reclamos ajenos al transporte. Lo único que exigimos es protección para poder trabajar”, señaló el dirigente en entrevista con Buenos Días Perú.
LE PIDIÓ AL MININTER FACILIDAD DE PORTAR ARMAS
Rau Rau pidió directamente al ministro del Interior, Carlos Malaver, declarar en emergencia distritos como San Juan de Lurigancho y dotar de resguardo a las unidades de transporte. “Le hemos pedido estado de emergencia, presencia policial real e incluso militares en los buses, como en la época del terrorismo. Lo que vivimos hoy es terrorismo urbano”, remarcó.
El dirigente reveló que durante la reunión con el Mininter y el general PNP Óscar Arriola la única propuesta recibida fue el uso de drones y agentes Terna en puntos estratégicos, lo cual considera insuficiente. Ante la falta de respuestas concretas, Rau Rau planteó medidas más drásticas, como permitir que los transportistas porten armas o contraten personal armado dentro de los vehículos.
“Si el Estado no puede protegernos, pedimos que nos den facilidades para capacitarnos y portar armas legalmente. La vida vale más que el dinero”, afirmó.
Finalmente, advirtió que, si no hay garantías, el gremio está dispuesto a suspender por completo el servicio en los próximos días. “Si no hay seguridad, apagaremos los motores”, sentenció junto a Martín Ojeda.