La violencia contra el transporte público cobró una nueva víctima. Alfredo Arturo Ramón Ramos, conductor de la línea A de la empresa Nueva América, fue asesinado este último lunes a las 5:30 a.m. en San Juan de Miraflores. Dos falsos pasajeros subieron a su unidad y le dispararon cinco veces a quemarropa.
Ramos trabajaba desde hace tres años en la compañía y se convirtió en el conductor número 41 asesinado en lo que va del año en medio de la ola de extorsiones que golpea a más del 80% de empresas de transporte en Lima.
SON AMENAZADOS POR VARIAS MAFIAS
Ante este panorama, la empresa decidió paralizar sus operaciones de manera indefinida, pese a que inicialmente se habló de dos días. Sus representantes denunciaron recibir amenazas no solo de la banda "Los Injertos de Lima Norte", a quienes pagaban cupos, sino también de otras organizaciones criminales.
El bus que manejaba la víctima, de placa D0Q-767, permanece estacionado en la base de Carabayllo como mudo testigo de la violencia. Mientras tanto, la incertidumbre crece entre trabajadores y usuarios, que reclaman garantías reales para poder laborar y trasladarse con seguridad.