Llevaban clases en el patio. Aulas agrietadas, columnas fracturadas y vidrios rotos tras los sismos del 15 y 17 de junio obligaron a enviar a 1 350 escolares a la virtualidad.
Lunas estrelladas sobre los pupitres, columnas abiertas y toldos improvisados en el patio para que quinto grado reciba clases al aire libre. Así luce hoy la I. E. N.º 3079 Virgen de la Medalla Milagrosa en Independencia después del sismo de magnitud 6.1 del domingo 15 de junio y la réplica de 3.7 del martes.
Padres y docentes protestaron a las puertas del plantel—construido en 1964—mientras sus hijos seguían la jornada escolar en salones declarados inseguros. "No esperemos la próxima réplica para que el techo les caiga encima", reclamó una madre. La alarma creció cuando una niña de inicial se cortó la mano con un vidrio desprendido.
El director, Julio García, recordó que el proyecto de demolición y nueva edificación (código SNIP asignado en 2023) “solo espera voluntad política” del Ministerio de Educación y del Pronied para ser licitado. El colegio alberga 1 350 alumnos de inicial, primaria y secundaria.
ADVIERTEN RIESGO DE COLAPSO
Tras una inspección, Gestión de Riesgos de la municipalidad concluyó que la estructura “no garantiza la seguridad de los niños” y recomendó suspender la presencialidad. Desde ayer, las clases se dictan virtualmente, a la espera de que el Minedu disponga módulos temporales o acelere la obra definitiva.
Mientras tanto, padres advierten que mantendrán la presión. "Queremos un colegio nuevo, no parches", protestaron.