El cuerpo cercenado de una mujer fue encontrado en las instalaciones de La Atarjea de Sedapal, en el distrito de El Agustino. Los restos de la víctima, aún sin identificar, quedaron atrapados en las rejillas de los filtros, cerca de las bocatomas por donde se desvía el agua del río Rímac.
Trabajadores de Sedapal realizaron el macabro hallazgo y alertaron de inmediato a la Policía Nacional. Agentes policiales, peritos y fiscales se trasladaron al lugar para llevar a cabo las diligencias correspondientes. Tras varias horas de trabajo, los restos fueron trasladados a la morgue central.
Hasta el momento, solo se ha podido determinar que el cadáver presentaba tatuajes en el torso, lo que podría facilitar su identificación. Los restos habrían sido arrojados al río Rímac y flotaron decenas de kilómetros en dirección este-oeste hasta llegar a las instalaciones de El Agustino.
Vecinos del sector expresaron su consternación y preocupación ante el hallazgo, manifestando el temor por la creciente inseguridad ciudadana. "Es un caos lo que está sucediendo aquí. Nos preocupa mucho sobre todo por lo que nuestros hijos tienen que enfrentar día a día, ir a la universidad, volver y todo eso", comentó una residente.
EMITEN PRONUNCIAMIENTO
Por su parte, Sedapal emitió un comunicado oficial en el que informaron su total colaboración con las autoridades para la identificación de la víctima y la investigación del caso. Asimismo, la empresa aclaró que este lamentable incidente no afecta el proceso de tratamiento del agua, por lo tanto, no hay riesgo para los millones de usuarios.