Una botica en San Juan de Lurigancho, ubicada en la avenida Los Postes, se salvó de ser asaltada por un delincuente armado, gracias a la rápida y decidida acción de uno de sus trabajadores.
ROMPIÓ PUERTA A PATADAS
El hecho ocurrió cuando el sujeto ingresó al local, amenazando al empleado con un arma de fuego. Acto seguido, el asaltante, al no poder acceder de inmediato a la caja, comenzó a patear violentamente la puerta que separa el área de despacho y la rompió. En ese momento, el trabajador, aprovechando el caos, logró encender la alarma del establecimiento y tomar el dinero para luego esconderse en la zona de almacenamiento de medicamentos.
El sonido de la alarma asustó al malhechor, quien, tras no poder acceder a lo que buscaba y ante la creciente presión, decidió huir del lugar sin llevarse nada.
Las autoridades ya cuentan con las imágenes de las cámaras de seguridad y se encuentran en la búsqueda del sospechoso para evitar futuros ataques en la zona, que es una de las más concurridas del distrito y se encuentra cerca de una comisaría.