En San Martín de Porres, la creciente delincuencia ha llevado a los vecinos de la urbanización San Germán a tomar medidas por su cuenta para garantizar su seguridad. La instalación de tranqueras en algunas calles y avenidas se ha convertido en una práctica común entre los residentes; sin embargo, esta iniciativa ha generado conflictos con la Municipalidad de San Martín de Porres, que les exige retirar estos elementos, alegando que perjudica al libre tránsito.
Según este grupo de ciudadanos, las tranqueras, ubicadas en el cruce de los jirones Matos y Mini Las Rejas, se han convertido en aliados vitales en la lucha contra la inseguridad dada la falta de políticas públicas efectivas contra la criminalidad en la zona. La municipalidad, por su parte, ha solicitado la remoción de estas estructuras, lo que ha generado descontento entre los residentes.
El presidente de la junta vecinal de San Germán indicó que esta problemática surgió recientemente por la gestión de una persona ajena al vecindario, y es por eso que la comuna está solicitando la remoción de las tranqueras, y argumentan que no permite al libre tránsito, aunque los residentes defienden su instalación como una medida necesaria para su seguridad.
La urbanización cuenta con personal de seguridad propio, incluyendo agentes de serenazgo y sistemas de alarma, financiados por los aportes mensuales de los vecinos. El vocero señaló que las tranqueras han estado en su lugar durante 20 años, tiempo en el cual han solicitado permisos sin obtener respuesta alguna por parte de la municipalidad. Además, destacó que la presencia de estas estructuras ha ayudado a reducir los índices de inseguridad, sirviendo como obstáculo para presuntos delincuentes, como lo demostró un incidente reciente donde dos sujetos fueron detenidos gracias a estas medidas de seguridad.