Los vecinos de Santa Elizabeth, en San Juan de Lurigancho, han reportado una serie de robos de medidores de agua que han dejado las calles inundadas y han causado preocupación. Según los residentes, en menos de una semana, se han robado 10 medidores de agua, ocasionando diversos aniegos en la zona.
Estos robos han tenido lugar en pleno estado de emergencia, con los delincuentes aprovechando las horas de la madrugada para cometer el delito. Las inundaciones resultantes han causado daños significativos en las calles, con las pistas quedando completamente agrietadas a causa del agua.
Uno de los aniegos afectó a un colegio de la zona, con los escolares y los padres de familia siendo los más perjudicados. En respuesta a estos incidentes, Sedapal ha emitido un comunicado en el que insta a los residentes a denunciar este tipo de robos ante las autoridades pertinentes.
PRONUNCIAMIENTO DE SEDAPAL
La empresa también informó que ya reparó las conexiones afectadas y está en proceso de reponer los medidores que han sido robados. Este tipo de delitos son un problema creciente en la zona, ya que no solo causan interrupciones en el suministro de agua, sino que también provocan inundaciones.