El pasado 12 de mayo, minutos después de las 7 de la mañana, inició una deflagración al interior del cuarto de una joven madre, ubicado en el tercer piso de la vivienda de su expareja que se encuentra en la calle Napo en San Martín de Porres, una explosión reventó la ventana de la habitación y eso alertó del incendio.
Grimanesa Ordinola Meca (23) se encontraba con sus hijos de 3 años y 7 meses cuando inició el incendio. Al parecer, tuvo que sacrificarse para proteger a sus pequeños y terminó con el 60% de su cuerpo comprometido con quemaduras de segundo y tercer grado, luego de cuatro días de lucha, falleció. El bebé tenia más del 25% de su cuerpo quemado, estuvo en cuidados intensivos, pero, afortunadamente, ya se encuentra estable y fuera de peligro, mientras la niña fue dada de alta.
Ahora las hermanas de la víctima sospechan de la expareja de la joven y de quienes la auxiliaron porque no les dijeron sobre la gravedad de las heridas de su hermana ni del bebé. Por otro lado, el sujeto que auxilió a su hermana le cambió de ropa luego del incendio, además que su ropa interior no se quemó, y al interior del cuarto solo el colchón estaba quemado, pero no los enseres de plástico ni el resto del lugar.
