La Policía intervino un centro médico donde el ciudadano venezolano Simón Antonio Mota Rondan (31) fue acusado de suplantar la identidad del doctor Ulises Rubén Ramírez Yaungil. Pese a negar la evidencia, finalmente aceptó que usaba el sello médico de otro profesional.
Más de 50 historias clínicas no tenían sello ni firma de médico alguno, además, en los ambientes del centro de salud se encontraron medicamentos vencidos. En este lugar se realizaban pruebas COVID-19 y se atendía a pacientes enfermos del virus.
El lugar intervenido está ubicado en la avenida Los Ruiseñores en Santa Anita, hasta donde agentes municipales llegaron y, tras las evidencias, clausuraron el lugar de manera temporal. Los responsables serán investigados por el presunto delito contra la salud pública, ejercicio ilegal de la medicina y usurpación de título profesional.
