La actual crisis económica debido a la segunda ola del nuevo coronavirus COVID-19 ha provocado una caída histórica de las ventas en productos textiles, donde casi el 50% de las tiendas de este sector ha quedado en serio riesgo y podrían quebrar si la situación no mejora en un futuro a corto plazo.
Ante la falta de clientes y las pérdidas económicas que arrastran desde que comenzó la pandemia en nuestro país, muchos intentan reinventarse ofreciendo más ofertas así como servicios novedosos como el delivery.
En el distrito de La Victoria, este es el caso de una emprendedora comerciante de ropa que intenta salir a adelante día a día para hacer frente a los efectos de la pandemia y a la inseguridad ciudadana.