Pese a que Fiscalizadores de la ATU, policías y militares llegaron para imponer el orden hasta la zona de Puente Nuevo, en El Agustino, ahora cunde la desesperación entre los pasajeros, que luchan por llegar a sus centros de trabajo mientras las horas pasan.
Mientras los transportistas evitan el paradero para evadir la fiscalización, quienes pugnan por abordar como sea los vehículos se enfrentan a descuentos por la tardanza, lo que genera un nuevo desorden y las protestas de varios de ellos.
Esto ocurre a dos días del anuncio del retorno a la cuarentena, y luego de que el Ministerio de Transportes y Comunicaciones informara que las unidades de transporte público solo operarán al 50% de su capacidad desde este 31 de enero hasta el 14 de febrero.