Los comerciantes ambulantes literalmente arriesgan sus vidas todos los días, y es que, muchos están sobre el carril de la salida de la vía de Evitamiento y lamentablemente las consecuencias pueden ser fatales.
En la zona del “Trébol de Caquetá” no existe el distanciamiento social ni las medidas de bioseguridad, ya que a diario se registra una guerra ensordecedora a través de varios megáfonos que inunda la avenida con dirección a la avenida Alfonso Ugarte.
Los informales puestos están instalados en una de las arterias principales de la capital, donde trailers, camiones, buses y vehículos pesados pasan muy cerca de los puestos de los comerciantes.
Cabe señalar que la zona del Rímac, es una copia literal de lo que pasa en Caquetá, pero aquí se suman las combis piratas que se mezclan con las voces y el desorden total por los ambulantes que han tomado como suya estas calles.