Tras las constantes lluvias en la sierra central, el Río Rímac ha aumentado su caudal, esto afecta a los ciudadanos que viven a la rivera del río, por lo que se recomienda no acercarse a las orillas.
Esta semana, una grupo reducido de personas fue arrastrado por el río cuando se realizaba un bautizo, afortunadamente, las dos personas que fueron jaladas por la corriente pudieron ser rescatadas por una patrulla que rondaba por el lugar. Esta imprudencia pudo haber tenido un trágico final.