La tala de varios árboles del parque José Abelardo Quiñones ha enfrentado a los vecinos de la urbanización Las Violetas, en San Juan de Lurigancho. Mientras los que tomaron la radical decisión señalan que fue para evitar que siga siendo guarida de delincuentes, otros propietarios señalan que existe otra motivación personal.
Un grupo de vecinos consideró que además de ser un atentado a la naturaleza, la tala ilegal se debería a que hay varios residentes que vienen promoviendo la construcción de una losa deportiva.
Señalaron que hace dos años también intentaron sin éxito cortar los troncos de los árboles con más de 40 años de antigüedad. En ese sentido cuestionaron que no se haya dialogado con todos los vecinos de la cuadra y que solo un grupo haya tomado la radical decisión que además, no contribuiría en la lucha contra la delincuencia.