En un sistema de transporte colapsado como en el de Lima, las combis, vehículos rurales que recorren la ciudad, se han vuelto parte del paisaje, cubriendo la demanda que sistemas como el Metropolitano, Corredores complementarios y el Metro de Lima, aún no pueden.
Sin embargo, muchas veces lo hacen en total informalidad, sin licencia, SOAT y sin respeto por las reglas de tránsito. Pero no siempre fue así. En los años noventa estos vehículos significaron una alternativa frente a un sistema que se tornaba aún más crítico que hoy.
Pero tras 30 años circulando, los expertos coinciden en que es tiempo de migrar a un nuevo sistema más ordenado, limpio y confiable.
Por ello sorprende la iniciativa de dos congresistas, Marcos Pichilingue (Fuerza Popular) y Luis Carlos Simeón (Acción Popular), para ampliar hasta por 10 años su autorización, que vencía este 31 de octubre.
Antes de eliminar a las combis de nuestras calles, es necesario implementar más servicios que lleguen a todos los rincones de la capita. De lo contrario, miles de limeños se quedarían sin poder llegar a sus destinos.