La noche del último sábado, el municipio de Barranco, ante la atenta mirada de su alcalde José Rodríguez, derribó este muro en el pasaje La Oroya, una pared que según acuerdo de consejo municipal es un espacio público para los barranquinos, pues como mostraron en sesión de consejo, ésta fotografía de 1925 donde muestra que allí se encontraba la plazuela La Oroya.
Sin embargo, para Francesca Delucchi, hija de una familia de artistas y artesanos barranquinos, esta casa le perteneció a su padre desde 1890. Según cuenta, ella y su hermano se dividieron el predio luego de la muerte de su padre y posteriormente ella obtuvo la numeración 140 de la bajada de La Oroya.
En otra fotografía de 1980 demuestra que el muro hoy derribado era el lindero de su vivienda. Además Delucchi muestra un documento de Defensa Civil del propio municipio de Barranco del año 2007 donde reconocen que luego de una avería de una cañería, el predio les pertenecía.