Tras el asesinato de un joven a manos de delincuentes extranjeros en San Luis, todo parece seguir igual. Las autoridades brillan por su ausencia en el jirón Ollanta.
Los vecinos denunciaron la presencia de la discoteca 'Al fondo hay Sitio', un local que ha causado la proliferación de sujetos de mal vivir que se han apoderado del lugar, incluso cerrando accesos en plena vía pública.
De otro lado, la familia y amigos de la víctima se mostraron indignados tras entrerarse de que dos de los sospechosos del sangriento crimen, Luis Emilio Vasquez Narvaez y Lixon Jesús Burgos Toledo, fueron liberados. Ellos no fueron acusados de homicidio.
En tanto, este martes se celebrará audiencia contra Gerson Palma Pino, donde se definirá si el asesino confeso recibe nueve meses de prisión preventiva. "Cómo es posible que la justicia haga esto", señaló visiblemente afectado el padre de la víctima.
