La bicicleta es sin duda la mejor forma de movilizarnos para evitar el contagio del nuevo coronavirus COVID-19 en los abarrotados vehículos de transporte público, pero además es un medio de transporte ecoamigable que nos ayuda a mejorar nuestro estado físico, sin embargo en nuestro país y sobre todo en la capital, sigue siendo un transporte inseguro pues las ciclovías que tenemos dejan mucho que desear.
Para el periodista especializado en transporte, Juan Pablo León, la bicicleta es importante en este contexto especialmente ya que no se tiene contacto físico con otras personas como en un bus de transporte público, donde hay cerca de 30 puntos de contacto físico con otras personas, las monedas, los billetes, la tarjeta, las barandas la misma puerta o la misma silla, pero sobre dos ruedas, solamente dos puntos de contacto: el manubrio y el timón.
Por otro lado, las autoridades no estimulan al uso de la bicicleta como medio de transporte y sin más señalización que unas líneas pintadas las ciclovías se convierten en un verdadero peligro.