Cientos de barriles de alcohol, miles de envases de plástico y maquinaria instalada en ambientes contaminados, eran parte de la cadena de producción de uno de los centros clandestinos más grandes del Cono Norte.
Inescrupulosos aprovechan que el alcohol es uno de los elementos principales para la desinfección durante la pandemia del Covid-19, e intentan comercializarlos sin ninguna medida de bioseguridad, por ello la Policía Nacional viene intensificando operativos con el objetivo de ponerle fin a este tipo de negocios informales.
Esta vez fueron los efectivos de la comisaria de Laura Caller, de Los Olivos, quienes hicieron la importante incautación de 3.600 litros de alcohol y la detención de dos personas.
Y en Pueblo Libre se intervino un departamento que era utilizado como almacén de alcohol en gel y alcohol medicinal, las cajas estaban guardadas sin ningún protocolo de almacenamiento, incluso las colocaban en la cochera de este inmueble.