Las recientes disposiciones que gravan el consumo de bolsas plásticas en el país responden a una necesidad urgente a nivel mundial por revertir la crítica situación de contaminación ambiental. Por ello, el reciclaje de estos productos se convierte en una alternativa que se debe tomar en cuenta.
En este sentido, la fábrica Paraíso, uno de los principales productores de plásticos en el Perú, ha optado por una posición crítica pero constructiva, pues si bien se ha manifestado en contra de la prohibición, ha planteado una alternativa muy interesante: convertir el plástico en ladrillos.
El representante de Paraíso, ingeniero Vicente Palacios, indicó que todo tipo de plásticos que se pueden encontrar en los hogares pueden convertirse en materia prima para estos productos, a través del molido y procesado en un proceso artesanal que da como resultado ladrillos y adoquines.
“La idea final es que debemos recolectar el plástico que vamos a desechar, no botarlo a la basura. El plástico que no llega a la basura es materia prima para el mundo”. Aunque indicó que la reciente ley contra el plástico podría implicar la pérdida de plazas de trabajo, su propuesta resulta muy atractiva.
Añadió que, aunque este proyecto recién comienza a implementarse en nuestro país, ya hay experiencias positivas en países como Argentina y Colombia.
