Rosario Audante realizó un préstamo al banco para adquirir un vehículo; sin embargo, luego de comprarlo el auto no funcionó. Desde diciembre el automóvil se mantiene guardado la conchera de su propietaria, quien se muestra indignada por la situación y denuncia ser víctima de estafa.
Ella denuncia que, luego de que le instalaran el dispositivo de geolocalización (GPS) a su vehículo, este dejó de funcionar. La afectada afirma que él banco la llama para exigir el pago deuda; sin embargo, no quieren hacerse responsables del desperfecto del automóvil, siendo ellos quien instalaron el dispositivo.
Audante señaló que el auto le costó 16 mil dólares; sin embargo, el préstamo que le entregó el banco fue de 40 mil soles. “¿Cómo lo voy a pagar si el carro que compré con ilusión para hacer mis trabajos y movilizarme?”
