El fútbol interbarrios, casi una leyenda extinta que paradógicamente sigue "muriendo" en épocas pre mundialistas, en distritos populosos nos encontramos con colosos deportivos que fueron creados por la comunidad para que niños y jóvenes de la zona puedan practicar al fútbol pero que por culpa de sus autoridades municipales son usados actualmente para otros fines. En el distrito del Rímac, al alcalde de este distrito no se le ocurrió mejor idea que convertir el mítico estadio Alejandro Villanueva del sector de Ciudad y Campo, en un almacén municipal, donde vehículos de todo tipo ocupan el lugar por donde debería estar rodando una pelota, perseguida por niños y jóvenes. Cabe señalar que este agonizante coloso lleva el nombre de una de las glorias de nuestro fútbol peruano, pero es hoy un almacén de chatarra.
Este otrora recinto del sentir popular, fue fiel testigo de épicos encuentros futbolísticos donde los jóvenes dejaban la piel con la esperanza de llegar a la profesional, en aquellos recordados interbarrios, semilleros de nuestras glorias peloteras.
Otro caso similar es el del estadio Sandro Baylón de Payet, sin embargo la municipalidad de independencia ha concesionado ese espacio público a una empresa privada que les cobra un promedio de cien soles la hora por el alquiler de las canchas, por que los vecinos tuvieron que pasar de las arengas de aliento en las tribunas, a las batallas legales por recuperar el terreno que le pertenece al deporte popular. y la han ganado en dos instancias, pero el alcalde ha apelado y el caso este recinto deportivo se encuentra ya en la corte suprema. Lo más grave de este asunto, es que no es un caso aislado ni un solo terreno deportivo, en realidad son dos estadios los que Independencia ha perdido en menos de 5 años.
Es bueno que recordar que no solo se avecina un mundial sino también una elección municipal y ese es el partido más difícil que deben jugar estos pobladores pensando en el futuro de los niños.
