Conozca los casos de asesinos que ocultaron a sus víctimas en maletas

El cuerpo de una cantante folclorica fue hallado en un maleta a la altura del kilómetro 64.5 de la Panamericana Norte, en Pasamayo. Sin embargo, esta no es la primera vez que un asesino utiliza una maleta para ocultar los restos de su víctima.

Sin ninguna clase de piedad, los sujetos asesinaron salvajemente a sus víctimas y los cuerpos los descuartizaron, quemaron o incluso arrojaron los restos a la basura en su intento por desaparecerlos y no dejar evidencias.

Algunos de ellos como Franklin Cotrina, el asesino confeso de la cantante Vilma Cruz Pinedo, conocida como “La Princesa de Marañon”, quien sin ninguna clase de remordimiento señaló que no se arrepentía por lo que había hecho.

Otro caso fue el de Jana Claudia Gómez Menéndez de 21 años, quien fue asesinada por su esposo, un ciudadano americano que conoció por Internet. El hombre arrojó su cuerpo al mar en una maleta pero cuando fue encontrada fue reconocida por un tatuaje.

José Luis Salas Santiago, no tuvo piedad con su enamorada Ana Carolina Valle Hernández, una joven que trabajaba como terramoza que fue asesinada a golpes. El sujeto colocó el cadaver en una valija y la enterró en una playa de Chincha.

En Huacho, los pobladores encontraron una maleta que se estaba incendiando con un cuerpo en su interior. Se trataba del periodista José Yactayo quien fue asesinado por Wilfredo Zamora quien confesó que lo cedo y descuartizó el cuerpo. Una parte la quemó en la maleta y el resto lo arrojó en varios puntos de la ciudad.

Un crimen similar ocurrió en 2012, luego que el periodista Ricardo Vásquez Mori cercenara el cuerpo de Enrique Rosendo Armestar Anci, de solo 27 años. El hombre de prensa esparció los restos en varios lugares y finalmente las investigaciones determinaron que la relación que mantenían terminó en un trafico asesinato.

Estos sujetos poseen característica similares quienes sus perfiles psicológicos revelaron tendencia a la mentira, a la manipulación y al egocentrismo. Incluso pueden parecer encantadores, inteligentes pero en el fondo tienen un grave trastorno.