La indignación y la furia se han hecho presentes en las calles de Francia, Bélgica, Suiza y Canadá. Los disturbios estallaron el martes pasado tras la muerte de Nahel, un joven de 17 años a quien un policía disparó a quemarropa durante un control de tránsito en este suburbio de París. El internacionalista, Juan Velít, extiende su análisis sobre el caso.
El experto señala, en una entrevista exclusiva para el programa Buenos Días Perú, que parte de la ira de los jóvenes que han participado en estas protestas se debe a que el sujeto interceptado pertenece a la comunidad afrofrancesa, lo cual parece haber abierto una herida en la historia del imaginario colectivo.
“Hijo de una madre soltera, él no era un delincuente, nunca había cometido un delito”, detalló Velit, sobre el perfil del joven, el cual es francés con raíces de Argelia.
Se menciona que el alzamiento de los sectores marginales de Francia podría deberse al trato que muchas veces recibe este grupo de personas por parte de las autoridades policiales.
“Estos sectores marginales están integrados no solo por franceses de condición económica muy modesta, muy baja, sino también por migrantes, sobre todo árabes (…) ellos llevan a la policía a tener una visión despectiva, es decir una subestima a estos jóvenes que los trata la policía de una manera muy brutal”, expuso.
El experto menciona que estas explosiones sociales se vienen repitiendo con cada vez más frecuencia en el viejo continente.
“Las grietas no solo se dan en Francia, sino en muchos países de Europa”, señaló.
DAÑOS EN FRANCIA
Según balance comunicado este martes por el ministerio del Interior se informó han registrado 24 edificios dañados, 159 vehículos incendiados y de 202 fuegos provocados en las calles durante esta séptima noche de violencia. Hasta el momento no se han registrado policías heridos.
