Lo que antes era una noche de diversión se transformó en una pesadilla. Las autoridades de España ya investigan 60 denuncias por “pinchazo”, una modalidad donde la víctima es inyectada con una sustancia alucinógena que la lleva a perder el conocimiento y podría sufrir abuso.
Nuevamente, la violencia contra la mujer vuelve a poner alerta a las ciudadanas españolas.
“Hay miedo, pero no tampoco te puedes quedar en casa”, señaló una joven.
CASOS EN AUMENTO
Las autoridades han desplegado más agentes para que estén alertas ante el incremento de casos.
El ‘pinchazo’ no solo ocurre en España, sino es un problema en toda Europa que inició en el Reino Unido y fue extendiéndose hasta los demás países.