Conmoción en Etiopía. Más de 200 personas fueran asesinadas durante un ataque armado en Oromiya, donde los atacantes abrieron fuego contra miembros de la etnia Amhara.
Un habitante del distrito de Gimbi, que logró escapar de la matanza, contó personalmente 230 cadáveres y calificó lo sucedido como el peor ataque contra civiles que se recuerda en la zona.
Otro residente narró que se enterraron a 260 personas, mientras que un tercer testigo elevó la cifra a 320 muertos. Algunas personas culparon al ejército de liberación de Oromo de la masacre ocurrida.
La mayoría de los asesinados se establecieron en la zona hace unos 30 años en el marco de un programa de reubicación en el territorio. Existen tensiones étnicas que se han ido intensificando en la zona africana, vale precisar, que la nación sufre una incertidumbre racial generalizada en varias regiones debido a los agravios históricos y tensiones políticas.