Tras varios días de agónico avance, finalmente, enormes lenguas de lava tocaron el mar y dejaron imágenes sorprendentes en España.
El magma se precipitó por un acantilado hasta caer al mar el último 28 de setiembre, inmediatamente se formaron enormes columnas de humo y gases tóxicos que han preocupado a la población. Sin embargo, especialistas informaron que vientos alisios dispersarán las emisiones del volcán y garantizarán la calidad del aire en las zonas pobladas.
La lava emitida por el volcán Cumbre Vieja cubre un total de 338,3 hectáreas, 981 edificaciones han sido afectadas por su avance, así como 29,8 kilómetros de carreteras. Científicos monitorean la actividad del volcán que sigue expulsando magma.
