Ingenio. Un Policía de Nueva York le salvó la vida a un hombre que estaba en grave riesgo de morir practicándole una inusual forma de primeros auxilios: utilizar una bolsa de papas fritas sobre la herida.
El héroe policial usó todo su ingenio para ayudar al hombre que había sido apuñalado en el pecho y sangraba profusamente. Con ayuda de una bolsa de papas fritas y de cinta para embalaje, el Policía pudo detener la hemorragia hasta la llegada de los paramédicos.
El herido fue llevado a un hospital donde uno de los médicos afirmó que la acción del agente salvó la vida del hombre. Posteriormente, según informó el New York Post, la Policía detuvo a un sospechoso que habría sido el causante del apuñalamiento de la víctima tras una discusión.