Una campaña en España buscaba sensibilizar a la población contra el racismo, pero generó el efecto contrario. Esta campaña estuvo organizada por el servicio postal de ese país.
La idea de la campaña es lanzar cuatro sellos de distintos tonos de piel, otorgando menor valor a las estampas más oscuras. La empresa postal dijo que esto tiene por objetivo reflejar la desigualdad creada por el racismo.
Pero miles han asegurado que colocar menor valor al color más oscuro termina enviando un mensaje racista, otros aseguran que no se entiende el objetivo que es poner la injusticia frente a los ojos. La iniciativa se llevó a cabo en el mes europeo de la diversidad y coincidió con el primer año de la muerte de George Floyd, quien falleció a manos de agentes policiales de Estados Unidos.