Como consecuencia del conflicto israelí-palestino, tras varios días de ataques a los palestinos en la ciudad de Jerusalén este que protestan contra el intento de desalojo de una decena de familias y contra las provocaciones de los colonos, Israel atacó la Franja de Gaza con diversos bombardeos.
Los ataques en la Franja de Gaza dejaron 35 muertos, entre ellos 9 niños, por su parte en Jerusalén este, soldados israelíes asaltaron la mezquita de Al-Aqsa que había sido ocupada esta por jóvenes palestinos para impedir el paso de una marcha ultranacionalista judía, que finalmente quedó interrumpida.
Cabe señalar que según informó el Ministerio de Salud palestino, 12 de los muertos eran menores de edad y seis de ellos murieron durante un mismo impacto.