Fenómeno meteorológico excepcional. Una tormenta de arena proveniente del desierto del Sahara, oscureció y tiñó de color amarillo los cielos de algunos países como Suiza, Francia y otras regiones europeas.
La niebla amarilla y sus finas partículas de arena se desplazaron desde el norte de África hacia Europa. La tormenta de arena llegó hasta Suiza, donde la nieve blanca de varias zonas quedaron teñidas de color ocre.
La arena del desierto también se posó en la nieve de Andorra. Cabe resaltar, que este fenómeno meteorológico, no es nuevo ya que suele producirse una vez al año durante la temporada de invierno.