En Alemania, Stephan Ernst, el neonazi que mató a Walter Lubcke, miembro del partido político de Angela Merkel que defendía la acogida de refugiados, fue condenado a cadena perpetua.
El caso por el que la audiencia territorial de Francfort condenó al ultraderechista ocurrió en junio de 2019. La víctima descansaba en su terraza cuando recibió un tiro en la cabeza.
El caso puso en evidencia la gravedad del problema de los grupos neonazis en el país. Ernst no podrá reducir su condena, al menos en los primeros 15 años.
