Sin vergüenza, el presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, insultó duramente a la prensa de su país en un evento privado con funcionarios cercanos donde no participaban periodistas.
El mandatario reaccionó a un reportaje que detalló un gasto de 330 millones de dólares en alimentos para distintas instancias del gobierno federal en 2020, incluyendo el pago de casi 3 millones de dólares en leche condensada para el Ministerio de Defensa.
Esta no es la primera vez que el polémico presidente ataca a la prensa, el año pasado la mayoría de las 580 agresiones a periodistas provinieron de Bolsonaro y sus hijos.