Mientras el voraz incendio sigue consumiendo la Amazonía. La tecnología sería una pieza clave para combatir esta catástrofe. Drones con cámaras infrarrojas ayudan a ubicar los focos de fuego, es decir, el punto donde inicia el siniestro.
Esto evitaría que los tripulantes y bomberos se expongan más de lo debido. Además, ayudaría a ahorrar tiempo y recursos para que los aviones esparzan el agua directamente en los puntos más intensos. El fuego lleva ya 18 días y avanza a una velocidad incontrolable.
En medio de la presión internacional y las críticas locales al gobierno del presidente brasileño, Jair Bolsonaro, hasta el momento el incendio ha consumido medio millón de hectáreas en la Amazonía, una de las zonas más importantes del mundo, que produce cerca del 20 % del oxígeno que respiramos.
Países como Chile, Colombia y Venezuela han ofrecido su apoyo al gobierno de Bolsonaro para intentar mitigar las llamas.
