El 70% de residuos plásticos son los denominados plásticos de un solo uso; es decir, aquellos productos que se utilizan una sola vez y posteriormente son arrojados a la basura como los tenedores, cañitas o popotes, bolsas.
La decisión deberá ser posteriormente aprobada por el parlamento y el consejo de la Unión Europea para que pueda entrar en vigencia. Este proyecto, considerado el más ambicioso del mundo en lo que se refiere a residuos contaminantes, recién podría ser aplicado en el 2021.
Según los impulsores de esta medida, en caso de no encontrar un reemplazo del plástico por lo menos se conseguirá reducir su uso en gran medida.