Caminos secundarios cerrados por árboles caídos, algunas inundaciones, daños en casas y distintas estructuras, y cortes de luz y agua constituyen el saldo que dejó el huracán Willa este miércoles tras golpear la costa del Pacífico en México con categoría 3, pero cuyos restos se desvanecen ya en tierra.
El Centro Nacional de Huracanes (NHC) en Miami, EE.UU., emitió su reporte final de este fenómeno que se dispersó durante la mañana sobre el norteño estado mexicano de Nuevo León, dominado por una cadena montañosa.
Mientras en el municipio de Escuinapa, localizado al sur del estado de Sinaloa y por donde pasó el centro de Willa la noche del martes, empezó la evaluación de los daños materiales y más de 2 mil pobladores regresaban a sus casas.
Equipos de los gobiernos tanto federales como de los Estados realizaron recorridos en la zona del impacto, con la finalidad de hacer un balance preciso de los daños y destinar los recursos del fondo para atender desastres naturales.