La falta de experiencia también aplica para los ladrones. Y es que algunos delincuentes han sido protagonistas de bochornosos momentos al intentar robar pues no se salieron con la suya por su falta de pericia en algunos casos.
En algunas ocasiones los delincuentes no han podido conseguir que su plan se ejecute con éxito alguno. Sin embargo, otras veces han sido ellos mismos quienes han frustrado su propio asalto y hasta han resultado heridos.
En Australia, un delincuente intentó arrancar el cajero automático que se encontraba en un grifo usando una cadena y su auto; sin embargo, tras dos intentos fallidos se da a la fuga. Otro sujeto tuvo la mala idea de colocarse una caja de cartón en la cabeza y terminó chocándose con todo a su paso.
Otros dos ladrones intentaban roban una tienda y lanzan una piedra para romper el vidrio de la puerta principal. Pero no sabían que esta era de material blindado por lo que rebotó golpeándolos y dejándolos inconscientes.
Un sujeto intentó robarle a un taxista que se encontraba a solo unos metros de una patrulla policial. También están los casos de los ladrones que tras cometer un asalto terminaron disparándose en la mano o pierna luego que se les escapara un tiro.
