En la ciudad de Chihuahua, en México, un grupo de hombres armados con fusiles de asalto ingresaron a un centro de rehabilitación para drogadictos y acribillaron a un grupo de pacientes. Al menos 16 personas murieron y 7 resultaron heridas tras el tiroteo.
De acuerdo con la Fiscalía mexicana el número de fallecidos por el ataque podría aumentar debido a que los heridos se encuentran en condición reservada. Según las primeras declaraciones de los testigos, los agresores llevaban capuchas y vestimenta de tipo militar.
Las fuerzas de seguridad municipal, estatal y federal, junto a miembros del ejército de ese país, han instalado puntos de control en la ciudad para localizar a los responsables del ataque.