Corea del Norte volvió a desafiar al mundo el último domingo. Esta vez, lanzó una bomba de hidrógeno y causó un terremoto que superó los 6 grados de magnitud en la zona norte del país. El hecho ha generado gran inquietud por parte de la comunidad internacional, ante el sexto y más potente ensayo nuclear de Pyongyang.
El régimen de Kim Jong-un asegura haber llevado a cabo su primera prueba de una bomba de hidrógeno para ser colocada en un misil intercontinental. La Organización del Tratado de Prohibición Total de Pruebas Nucleares (CTBTO, en sus siglas en inglés) señaló que "la magnitud y la fuerza de esta actividad es un indicativo de que el programa armamentístico de Corea del Norte ha alcanzado un nivel distinto".
Por su parte, Corea del Sur también condenó firmemente el ensayo y convocó una reunión urgente de seguridad. Mientras que el Secretario de Defensa de Estados Unidos, James Mattis, señaló que no buscan la aniquilación total del país pero tienen opciones de poder hacerlo. Algunos líderes mundiales también se han pronunciado al respecto.
