El candidato del partido democrático Moon Jae-in, obtuvo 41.08% de los votos en las elecciones, seguido por el conservador Hong Joon-Pyo, con un 24.03% y el centrista Ahn Cheol-Soo, con un 21.41%, entre otros.
Fueron unos comicios convocados en Corea del Sur, tras la destitución de Park Geun-Hye del cargo de gobernante por estar involucrada en el mega escándalo de corrupción conocido como “rasputina”.
Algunos especialistas aguardan que el nuevo mandatario realice grandes cambios políticos en su nación durante su mandato, atendiendo, entre otros puntos, el tema de las relaciones con Corea del Norte.