Por tercera semana consecutiva cientos de trabajadores públicos tomaron las principales calles para exigir a la presidenta Michelle Bachelet, una solución a los ajustes salariales.
Y es que hace unos días la violencia se fue exacerbando poco a poco entre la población, luego que otros manifestantes fueran desalojados del Congreso. Por su parte, el presidente de la Asociación Nacional de Empleados Fiscales, manifestó su rechazo ante las medidas tomadas.
Durante la protestas aprovecharon para entregar al Ejecutivo una carta en la que se convoca a un diálogo con el Gobierno para negociar los sueldos y poder tratar otros temas.