Chile vivió un nuevo proceso electoral, pero esta vez marcado por resultados sorpresas y la poca asistencia de los ciudadanos, expresada en la abultada abstención.
Más de 14 millones de chilenos estuvieron llamados a las urnas para escoger a alcaldes y concejales en 346 comunas de todo el país. Desde muy temprano, la presidenta chilena, Michelle Bachelet, acudió a sufragar, aunque lo hizo de forma accidentada al olvidarse de firmar el acta y el carné.
El día también proyectó una escasa participación ciudadana. Más del 60% se abstuvo de las elecciones, en tanto que la asistencia bordeo el 35%. Con el paso de las horas se conoció que la derecha opositora ganó los comicios municipalidades desarrollados el pasado domingo.