Eduardo Cunha, expresidente de la Cámara Baja de Brasil, fue intervenido por su presunta implicación en la trama de corrupción en la petrolera estatal Petrobras.
Cunha, quien fue uno de los cerebros detrás de la destitución de Dilma Rousseff, la presidencia brasilera, fue detenido por orden del juez Sergio Moro, quien investiga su presunta participación en el caso.
La detención se produjo cerca de su vivienda en Brasilia, y luego fue trasladado hasta la sede de la Policía Federal en Curitiba.