En China, tensos momentos se vivieron cuando un niño de cuatro años quedó atrapado en las rejas de una ventana, a más de 20 metros de altura.
El pequeño cayó entre las rejas quedando suspendido sólo de su cabeza. En medio del pánico de los vecinos, un valiente hombre escaló hasta la ventana para rescatarlo.
Diversos medios internacionales dan cuenta de que el niño se encuentra en buen estado de salud y no habría sufrido mayores lesiones