El presidente ecuatoriano Rafael Correa justificó las recientes deportaciones de ciudadanos cubanos, quienes se encontraban de manera irregular en dicho país.
El jefe de Estado ecuatoriano afirmó que su gobierno no será parte de lo que calificó como tráfico de personas y que su posición no vulnera los derechos humanos.
Asimismo, el mandatario criticó el manejo de la crisis migratoria a través de los medios de comunicación. Un total de 121 cubanos irregulares han sido deportados desde el 9 de julio, mientras otras 29 personas fueron dejadas en libertad tras ser retenidos luego que demostraron su estatus migratorio.
