El director del Instituto para las Obras de Religión-IOR, conocido como el Banco del Vaticano, Paolo Cipriani, y el vicedirector, Massimo Tulli, presentaron hoy su dimisión irrevocable al cargo, informó la Santa Sede.
La dimisión de ambos, que fue aceptada por la Comisión de Cardenales, se produce tras la detención el pasado viernes del alto prelado Nunzio Scarano, acusado de fraude y corrupción en una investigación sobre supuestas irregularidades en la institución bancaria vaticana.
"El director del IOR, Paolo Cipriani, y el vicedirector, Massimo Tulli, han dimitido de sus cargos. Tras muchos años de servicio, los dos han tomado esa decisión en el mejor interés del instituto y de la Santa Sede", señaló el Vaticano en una nota.
Agregó que "el Consejo Supervisor y la Comisión de Cardenales han aceptado las dimisiones y han pedido al presidente del IOR, Ernst von Freyberg, que asuma de manera interina las funciones de director general con efecto inmediato".