Ella fue pieza primordial del exitoso programa infantil de Panamericana Televisión, “Nubeluz” uno de los más sintonizados en la televisión nacional e internacional.
Desde su aparición en las pantallas un 4 de septiembre de 1990 Mónica Santa María se ganó el cariño de los niños y la admiración de los padres por su belleza y ternura, junto a la otra Dálina, Almendra Gomelsky.
Pero Mónica a pesar que el éxito le sonreía a nivel continental tuvo una vida trágica a causa de la depresión, que marcó a la también llamada ‘Dalina chiquita’.
El amor de los niños, la fama y toda la fortuna que la rodeaba no fue suficiente para poder lidiar con varios problemas y tomó una falta decisión que acabó con su vida, y según reportes médicos, la conductora habría sido bipolar, pero no pudo tratarse correctamente.
Dejó un legado en la televisión nacional y continúa en el corazón de quienes aun la recuerdan como la “Dálina chiquita”, como la “Dálina más bonita” que fue parte de su infancia.