El abogado de Paolo Guerrero, Julio García, reveló en una entrevista para Buenos Días Perú mayores detalles sobre la situación legal del ‘Depredador’ luego darse a conocer que no jugará por la Universidad César Vallejo tras las amenazas que viene recibiendo su madre.
“Aquí hay dos etapas. Una primera, en la que se necesita terminar el vínculo. Paolo es un jugador profesional de fútbol y no puede jugar en Vallejo porque ya tomó la decisión, que le atañe solamente a él por un tema de seguridad (…) las amenazas han ido ampliándose, han llegado con fotografías, etc. Ya se han hecho las denuncias a las autoridades correspondientes (…) Ahora esa etapa sólo va a terminar si la Universidad Vallejo está de acuerdo en terminar el contrato o si vamos siguiendo los procedimientos deportivos, de una manera unilateral este contrato”, expuso el letrado, quien destaca que los tiempos están en contra, señalando que quedan casi 10 días para que se cierren los libros en la mayor parte de ligas.
“El segundo paso, que requiere que se haya cumplido el primero; es decir, que Paolo sea libre, es buscar un equipo que Paolo identifique, que puede ser en cualquiera de las ligas; pero lo prioritario es jugar. Hoy por hoy, Vallejo le está exigiendo que se presente, cuando él claramente ha manifestado que no tiene la disposición de ir a Trujillo. Y le exige que se presente el sábado”, indicó el abogado, quien pide que haya coherencia entre lo que se manifiesta en el gobierno regional y lo que se hace en el club.
El letrado señala que Vallejo le ha enviado una carta en la que desconoce las amenazas que está recibiendo el futbolista.
“NO HAY PENALIDAD”
La defensa legal señala que “no hay penalidad” si Paolo Guerrero se retira del club, destacando que existen procedimientos y que siempre “prima la libertad del trabajador”, aclarando que “hay consecuencia”, pero que el principal problema es que “están con el tiempo”.
Durante este procedimiento se tiene que determinar “una causa justa” para que el jugador se pueda retirar del club.
El futbolista fue muy enfático al señalar que, hasta el momento, no le han pagado nada y que el principal afectado en esta situación es él.
"Ellos no me pagaron ni un sol a mí", señalando que solo hay una firma, pero que no hay ningún gasto.
El delantero expuso la molestia que siente al darse cuenta de que por el momento solo tiene dos opciones: jugar en Trujillo o dejar su pasión, el fútbol.