Bajo estrictas medidas sanitarias para evitar contagios de Covid-19, la antorcha de los Juegos Olímpicos de Tokio 2020 comenzó un "relevo burbuja", que arrancó en la prefectura de Fukushima.
En su primer día recorrió un total de 11 localidades afectadas por el terremoto y tsunami de hace 10 años y también por la crisis nuclear del 2011.
La futbolista nipona Azusa Iwashimizu fue la encargada de prender la antorcha a partir de la llama olímpica que permanecía preservada en un candil en Japón desde hace un año.
"Me ha honrado ser la primera persona en llevar la antorcha hoy. Han pasado diez años desde que nos juntamos, hoy era una buena ocasión", dijo la deportista a los medios de comunicación.